La escasez de agua en El Junquito, Caracas, ha convertido el día a día de Andrea, una joven con una enfermedad crónica, en una batalla por la supervivencia. Sin acceso regular al líquido vital, su familia enfrenta graves obstáculos para mantener su higiene, preparar medicamentos y manejar su condición médica, aspectos esenciales para evitar complicaciones. La falta de agua potable obliga a sus cuidadores a recurrir a métodos costosos, como la compra de bidones o el acarreo desde zonas lejanas, agravando su situación económica y emocional. Esta realidad refleja una crisis humanitaria silenciosa, donde la deficiente infraestructura pública pone en riesgo la vida de los más vulnerables.
La historia de Andrea no es aislada: en El Junquito, miles de personas sufren las consecuencias de un sistema de servicios colapsado. Niños, ancianos y pacientes con enfermedades crónicas son los más afectados, viendo vulnerado su derecho a la salud y al agua. Organizaciones sociales exigen respuestas urgentes a las autoridades para garantizar el suministro continuo y políticas públicas que prioricen a quienes dependen de recursos básicos para sobrevivir. Mientras tanto, familias como la de Andrea siguen esperando soluciones en medio de la desesperación.
Fuente: Escasez de agua en El Junquito perjudica el cuidado de la enfermedad de Andrea
Magaly lava los implementos de cocina una o dos veces al día para poder rendir el agua.| Foto: Crónica.Uno